Crema de limón

Me regaló una amiga de mi hijo una buena bolsa con limones. Por lo visto tiene un limonero en casa y se le viene abajo de lo cargadito que está,...no como el mío, que da pena de verlo.

¡Qué diferencia con los limones que se compran en el mercado! Están como recubiertos de un aceitillo que, cuando los coges, se te pega a las manos dejándote ese aroma tan exquisito.

En esta coyuntura tuvimos el antojo de hacernos un postre bien sencillo y que hacía tiempo que no comíamos en casa: una cremita de limón.

Y al hilo de los limones, qué mejor musiquilla para ambientar la cocina que aquella de Fool's Garden llamada "Lemon tree", que es como llaman los hijos de Su Graciosa Majestad -que aún no sé dónde la tendrá,...la gracia, digo- y los que adquirieren su lengua aunque sólo sea para cantar, a nuestro limonero; pero me temo que éstos de la canción no se endulzaban tanto como lo vamos a hacer nosotros.

Para hacernos la crema vamos a tener que tener por ahí lo que sigue:

• Una lata de leche evaporada -de las de 410 gramos- que habremos metido en el congelador dos horas antes.
• 1/2 vaso, de los de agua, de zumo de limón.
• El mismo vaso lleno de azúcar.

 Echamos todos los ingredientes juntos en un bol y se bate todo bien tratando levantar una espumilla que haga que quede una textura parecida a la de una mousse. Llenamos directamente los cacharritos donde la vamos a servir y las metemos en el frigo, pues hay que tomarla bien fría.

Como veis en la foto, yo he aprovechado esos cacharritos de barro que vienen con algunos postres industriales, y de los cuales tengo guardados unos cuantos para ocasiones como ésta. No son muy finos, pero son muy prácticos y dan cierto aire rústico a los postres caseros.